La agenda del hidrógeno verde en el Perú

Por Fernando Maceda, Asociación Peruana de Hidrógeno

Por mucho tiempo creímos en la estabilidad climática del planeta y en la infinitud de sus recursos, lo que hizo que el devenir de la vida humana pareciera inmodificable. Pero en los últimos trescientos años, se podría decir que tuvimos un aumento casi geométrico de la población mundial, lo que hizo que el consumo de nuestros recursos naturales se multiplicase por ocho, llevando a un aumento de hasta trece veces de los gases de efecto invernadero, dando lugar al cambio climático, el cual ya tiene efectos visibles en el espacio natural en el que nos desarrollamos.

A partir de lo cual surge el siguiente cuestionamiento: ¿Cómo no nos hemos dado cuenta de que estamos consumiendo nuestros recursos finitos, poniendo en riesgo el bienestar de todos?

Es ante esta emergencia, que se han desplegado acciones y esfuerzos para hacerle frente al cambio climático, promoviendo la transición energética, que incluye medidas de ahorro y eficiencia energética, continua con la sustitución de fuentes de energía eléctrica fósil por fuentes renovables, electrificación de procesos y finalmente adopción de vectores energéticos como el H2, los combustibles sintéticos y los bio combustibles.

Es así, que aparece el hidrógeno verde, una alternativa sostenible para la descarbonización de la economía y la mitigación del cambio climático, para darle la oportunidad al Perú de acelerar su desarrollo económico y social.

El Perú tiene un gran potencial para desarrollar el mercado del hidrógeno verde, debido a sus condiciones geográficas y climáticas que favorecen la generación de energía renovable a bajo costo. Según un estudio realizado por Engie Impact y la Asociación Peruana de Hidrógeno (H2 Perú), el Perú podría producir hidrógeno verde a un precio competitivo a nivel internacional, entre US$ 1,5 y 2,5 dólares por kilogramo, a partir del 2040.

Como vector energético va a tener un rol clave para atender las necesidades que tendrán aquellas aplicaciones intensivas en uso de energía, permitiendo así la transición energética local; pero al mismo tiempo va a quedar disponible una amplia oferta ya que superará largamente el requerimiento local y se podrían dar los primeros pasos para que el Perú pueda exportar al mundo.

Por lo que, el Perú podría aprovechar su ubicación estratégica y su infraestructura portuaria para exportar hidrógeno verde a los mercados de Asia, Europa y Norteamérica, donde existe una creciente demanda de este combustible. Esto representaría un fuerte ingreso de divisas y una oportunidad para diversificar la oferta exportable peruana.

Por ello, H2 Perú presentó una propuesta de hoja de ruta del hidrógeno verde en el Perú, que contiene las bases y recomendaciones para la elaboración de la estrategia nacional. La propuesta busca contribuir al debate público sobre el rol del hidrógeno verde en la transición energética del Perú y alinear los esfuerzos del sector público y privado para impulsar este mercado. Ahora, el Ministerio de Energía y Minas MINEM está desarrollando un análisis técnico al cual H2 Perú contribuye. Además, el BID está apoyando al MINEM en el desarrollo de la hoja de ruta y estrategia nacional del H2V en el Perú, con lo que estiman finalizar el estudio en julio de este año.

Por otro lado, hemos propuesto en febrero 2022 un proyecto de Ley de promoción del hidrógeno verde sobre el cual la Comisión de Energía y Minas del Congreso está actualmente trabajando.

En este documento se proponen ya algunas medidas de promoción como incentivos tributarios y financieros para el desarrollo de proyectos piloto e industriales de producción, manejo y adopción de hidrógeno verde.

El hidrógeno verde ofrece una oportunidad al país para poder aprovechar sus recursos naturales y posicionarse como líder en la producción de una de las energías del futuro, por lo que es necesario el desarrollo de un marco regulatorio de promoción del hidrógeno verde y la suscripción de una hoja de ruta país que permitan generar la condiciones para el despliegue de proyectos piloto e incentive las alianzas entre actores públicos y privados con la región.